La Federación Europea de la Industria Farmacéutica ha dado a conocer su hoja de ruta para la eliminación de las pruebas con animales en las evaluaciones de seguridad química. A través de un artículo de Kirsty Reid, directora de Política Científica de Efpia, la organización da un repaso a su teoría de las ‘Tres Cestas’ en las que basa la eliminación gradual de este tipo de test a través de tres conceptos: Reemplazo, Reducción y Refinamiento.
“Ayudar a definir una hoja de ruta que pueda redefinir los fundamentos de cómo evaluamos la seguridad de los medicamentos es una tarea abrumadora, pero a la vez emocionante”, asegura Reid, quien considera que la visión a futuro de la eliminación de los animales en esta ecuación “parece más cercana que nunca”.
Reid asegura que “la forma de pensar sobre ciencia” está atravesando un cambio transformador, determinado no solamente por las “voces sociales que exigen modelos más relevantes para los humanos”, sino también por las “conversaciones regulatorias cada vez más abiertas al cambio”.
El planteamiento de la industria se resume en un marco práctico que abarca el citado enfoque de las 3 Cestas, En la Cesta 1 se incluyen aquellas pruebas que pueden detenerse en la actualidad, la mayoría de ellas “obsoletas, redundantes y que ya no son científicamente necesarias”.
En la segunda de las cestas incluiría aquellas que hoy por hoy son necesarias para el desarrollo de la innovación, pero necesita más validación y finalmente la tercera de las cestas incluye todos los cambios necesarios para dar respuesta a una transformación para la que a ciencia aún no tiene respuesta, pero que según Reid “una investigación ambiciosa podría cambiar esta situación”.
Desde la Efpia se advierte que no se deben esperar resultados inmediatos, sino de cambiar concepto y de invertir en soluciones alternativas: tecnología de órganos en chip, toxicología impulsada por IA e investigación global colaborativa.
En relación con la hoja de ruta de la Comisión Europea para eliminar gradualmente el uso de animales en las pruebas de seguridad química está a la vista y en los próximos días, en Helsinki, en la Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas (ECHA), todas las partes interesadas se reunirán para conocer los resultados de diversas iniciativas lideradas por la Comisión Europea y se debatirá el primer borrador de la hoja de ruta en el tercer taller de la Comisión.
“Debemos ser honestos sobre los desafíos futuros: la fragmentación regulatoria, los silos de datos, el temor a la propiedad intelectual y la reticencia que conllevan los nuevos enfoques pioneros. Estos son obstáculos reales. Nuestro informe analiza cómo ofrecer soluciones: puertos seguros para el intercambio de datos, incentivos para los primeros usuarios y exigencias de una armonización regulatoria global”, asegura Reid.